Tónicas premium

Ya lo hemos comentado alguna que otra vez en el blog: lo de llegar a un bar y pedir “un Gin Tonic, por favor”, así, sin especificar nada más, pasó a la historia hace algún tiempo.

Las tónicas Premium surgen casi, casi al mismo ritmo que las nuevas ginebras, ya que uno de los principales secretos del auge del Gin Tonic es el maridaje selectivo de tónicas. Por este motivo, las cartas de tónicas crecen a buen ritmo, para que cada cóctel sea una experiencia única y cada tónica case perfectamente con las propiedades de cada tipo de ginebra: con aromas herbales, cítricos, minerales, etc.

Y es que la tónica es lo que aporta el toque refrescante al Gin Tonic, característica fundamental de un cóctel cuya elaboración se ha convertido en todo un arte. Los aficionados a esta bebida sabrán con cuánto cuidado y esmero hay que verter la tónica en la copa para que no se rompa la burbuja, para que un Gin Tonic sea perfecto.

Conoce la historia de la tónica, el origen de la quinina

Pero volviendo al maridaje, las marcas se esmeran en sacar al mercado diferentes tipos de tónica para satisfacer la demanda de los incondicionales del Gin Tonic. Algunas de ellas tienen sabores tan exquisitos, que dan ganas de beberlas solas, sin mezclar con ginebra. Por ejemplo, las tónicas Macario, con su su refrescante mezcla de notas cítricas, dulces y herbáceas.

El truco para reconocer una buena tónica, es que ésta tenga suficiente cuerpo, sin llegar a disimular el sabor de la ginebra. Además, podremos jugar con diferentes matices y sabores dependiendo de la que elijamos, ya que con la tónica es posible dulcificar, contrarrestar o destacar el sabor de la ginebra.

Las tónicas suaves y refrescantes permiten apreciar todas las tonalidades de la ginebra, como la tónica Markham, que tiene un toque amargo muy sutil, y es perfecta para combinar con ginebras Premium.

A los más tradicionales les gustará la tónica 1724, que debe su nombre a su elaboración: se fabrica en Argentina según el procedimiento tradicional, con quinina recogida a mano a 1724 metros de altura sobre el nivel del mar en el camino del Inca, el lugar donde nació. Es una tónica muy refrescante, con emboques cítricos y florales.

Por el contrario, las tónicas Original o Finches, aportan un sabor mucho más característico y de larga duración al Gin Tonic, gracias a su mezcla de cítricos. La marca Original tiene diferentes tipos de tónicas, como la Original Pink, con sabor a frutos rojos, o la Original Blue, mucho más cítrica. Por su parte, la tónica Finches contiene una combinación de quinina, mandarina, naranja, pomelo, lima y limón que la hacen sumamente aromática.

Además, otras marcas tradicionales como Schweppes, también han lanzando nuevos sabores muy atractivos al paladar: pimienta rosa, ginger y cardamomo, azahar y lavanda.

Y es que, gracias a las variedades de esta burbujeante bebida, se hace más fácil aportar nuevas experiencias, personalizar y aportar nuevos detalles, que son fundamentales a la hora de elaborar un Gin Tonic magistral.